Aquí estoy después de más de un año recogiendo los pedazos
que quedaron de mi auto-destrucción. Vuelvo a escribir para que mi mente deje
de torturarse que ya no vale la pena estar triste por esa causa. Porque para
llenar ese “vacío” llegue a recurrir al
alcohol llegando extremos realmente lamentables, así que tome la decisión de
apartarme de mis amigos hasta recuperarme que por supuesto aún todavía me
afecta pero soy capaz de dejarlo a un lado.
Empecé a salir solo, alguna vez me encontraba con conocidos
y pasaba la noche con ellos, pero normalmente las pasaba solo caminando por el
pueblo haciendo una “ruta” que no la diré porque así se pierde la “magia” del
momento. Quería pensar en cómo podía arreglar la situación pero me di cuenta
que lo hecho, hecho está. Que ya no
puedo vivir de nuevo esa “fantasía” destruí cualquier posibilidad de poder
sentirme “feliz” en esas situaciones.
Con estas cosas me doy cuenta de lo patético que soy y puedo
llegar a ser, del miedo que tengo a decir que lo pienso a los demás para que no
me rechacen, todo eso para conservar a los amigos. Así que rechazo beber hasta perder el
conocimiento porque si lo hago yo está mal.
Porque si yo digo siempre que pienso se puede montar una
gran escandalera y paso de tener que dar explicaciones de las cosas que digo y
dejo que decir.
En los paseos que daba por mi “ruta” siempre iba con mi mp3
escuchando la música que hacia como distracción en mi mente, al menos casi
siempre. Algunas de las noches que no
salía me quedaban en el ordenador viendo series, películas o algo que
distrajera. Estas cosas que escribo no es para que nadie se dé por aludido, no
es mi intención hacer eso. Porque no vale la pena ponerme a discutir con la
gente. Hare lo de siempre, sobrevivir, solo o acompañado a nadie se le obliga a
que sea mi amigo/a.
Acabo ya de escribir esto porque mi mente esta ya perdida
con estos pensamientos, así que adiós, mis queridos lectores, recordar la
sinceridad hay que darla poco a poco, por lo que pueda llegar a pasar.
PD: Las comillas representan la ironía
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